Recomendaría este lugar a todos los que vayan a Saint-Michel. Me han gustado mucho mis 2 noches aquí. Las habitaciones son enormes, bonitas con balcón y con una ducha estupenda. El personal es súper bueno y excepcional, y las instalaciones están limpias. El restaurante del lugar es increíble.

El hotel era un buen sitio para alojarse. Gozaba de una zona hermosa, no muy lejos del bistró. El personal fue muy educado, gracias a ellos todo fue formidable. El desayuno tenía una buena cantidad de opciones para elegir, lo que elegí estaba rico. Los servicios eran excelentes.

La cabaña en la que nos alojamos era preciosa, con una auténtica atmósfera canadiense. Disfrutamos de una vista maravillosa y de una ubicación perfecta para explorar la naturaleza. Además, la habitación y el baño estaban muy limpios y bien equipados, lo cual fue muy agradable. recibimos un buen servicio por parte del personal del hotel y tuvimos la oportunidad de disfrutar de un delicioso desayuno cada mañana.

Hubo un inconveniente en la recepción, ya que tuvimos que esperar varias horas para hacer el check-in y también hubo un problema con la asignación de las habitaciones. Sin embargo, estos contratiempos no empañaron nuestra estancia en general.